ERES UN SOLTERON O UN "SINGLE"

La filosofía del "single".

Un single es toda persona de entre 25 y 64 años que, en la actualidad, no tiene pareja estable, sin importar que sean solteras, separadas, divorciadas o viudas. Parece que esta condición social va, cada vez más, en aumento con Irlanda como país europeo que se lleva la palma, con un 55 por ciento de población no casada.


“¿Soy Single?”, el libro que Victoria Bermejo y el dibujante Miguel Gallardo (Editorial Granica) han dedicado a este colectivo, resulta un manual de lo que ellos denominan su “propio estilo de vida”.“El single tiene una filosofía de vida muy marcada”, dice el libro. Si por algo destacan los solteros es, precisamente, por depender sólo de ellos mismos. El “yo, mi, me, conmigo”es el síntoma más claro. Se podría decir que los singles son egoístas, aunque ellos defienden que su actitud es de “autoafirmación”, de conquistar la libertad individual.

El single se cuida, está al día de todos los productos de belleza que prometen mantenerse en la eterna juventud. El single se compra los mejores zapatos, que serán distintos según sean para trabajar, ligar o bailar. Se apuntan a la última moda en gimnasia, se compran la mejor ropa para ellos o para la casa y, además, encuentran cualquier explicación para justificar ante los demás sus gastos. Lo cierto es que, para los singles, el aspecto físico es lo más importante y no les importa gastarse dinero en ello.

Los “singles” defienden su derecho a vivir solos y se muestran orgullosos de hacerlo, aunque no dejen de estar en contacto con sus amigos las veinticuatro horas del día. La amistad es su “sentimiento máximo” y el teléfono su herramienta básica para comunicarse con ellos, llamando o enviando SMS que destacan por ir directamente al grano.


Las conversaciones a través del chat también son muy útiles para conocer gente y la impersonalidad que conlleva este medio se rompe cuando aprovechan la charla para quedar y quien sabe si, a la larga, empezar una relación.

Internet también es básico para formarse sobre cultura general y luego poder alardear ante los amigos. Es decir que, aunque presuman de querer estar solos porque esta es, a su entender, la mejor forma de vivir, necesitan del contacto, sea virtual o real, con los demás.Impuntuales siempre, pero eso no quita que se muestren interesados para el trabajo. Los singles sueñan en llegar a lo más alto de la jerarquía laboral.

Aunque llegan tarde, son siempre los últimos en marchar, para ver si pueden sacar puntos, van a todas las reuniones importantes, dejan al aire comentarios brillantes en las comidas, etc.Sin embargo, no pueden engañar a nadie, con lo que no se salen con la suya nunca. A pesar de eso, ellos siguen igual de orgullosos y su autoestima no baja en ningún caso. Los singles se sienten seguros de sí mismos y muy capaces de asumir cualquier responsabilidad.

Es ese mismo egoísmo, ese pensar sólo en ellos lo que les lleva a ser así, a menudo, sin intención de dañar a nadie, pero deseando siempre lo mejor para ellos a costa de lo que sea.En casa, en cambio, los singles son muy detallistas y muy maniáticos. Aspiran a lo máximo en cuanto al inmobiliario. Ahora bien, el orden es siempre personal y cada uno lo entiende a su manera: comida caducada en la nevera, potes de mil y un producto para la limpieza y el cuidado del cuerpo…Por lo que se refiere a la comida, la pereza les puede más y se pasan a la pasta, porque es sencillo de preparar, o a cualquier otro plato que no suponga estar más de media hora en la cocina. La otra solución es recurrir al restaurante.

La familia está bien, pero deben mantenerse las distancias. En realidad, lo que está bien es que les cuiden, aunque no siempre. Sólo cuando ellos quieran y durante el tiempo que ellos puedan soportar. Les gusta que mamá les lave la ropa, que les haga la comida, que les llame de vez en cuando, aunque no más de tres minutos, para saber cómo están. Sin embargo, no soportan las comidas familiares, ni las sobremesas. Saben que les necesitan porque son los únicos que aguantan sus caprichos, pero no pueden con ellos.


¿Y los hijos? Tanto los que los tienen como los que no, los consideran un “pequeño problema”. Los primeros, porque les impiden ser ellos mismos, tener sus caprichos, sus manías. Los segundos, porque los quieren igual que ellos, tanto en los aspectos físicos como de carácter.

DIVERTIRSE HASTA MORIR-.Ya nunca más debe asociarse ser soltero con soledad o tristeza. Los singles saben pasarlo bien. Es más, quieren pasarlo bien cuanto más horas mejor para romper con el tópico. Soltero sí, pero nunca aburrido.Ir de viaje, pedir habitación doble para uso individual en el mejor hotel de la ciudad, bailar, cantar, probar todo lo nuevo, apuntarse a cursillos o ir al gimnasio. Cualquier actividad es buena para distraerse y, sobre todo, divertirse lo más.

Viajar es más complicado de lo que parece. Para el single, no todos los viajes son buenos. Le encantan los cruceros porque le permite conocer gente de su misma estado civil, porque hay actividades organizadas, porque es un sinfín de fiesta.Bailan y, sobre todo, cantar sus temas preferidos en las salas de baile o en cualquier local de noche. Se emocionan, se ríen y tratan de pasarlo lo mejor posible, con o sin amigos.Taichí, risoterapia, shiatsu, grimberg…se conocen todas las técnicas más modernas de gimnasia que existen.

Son adictos a los masajes y siempre están a la última.Los solteros de hoy en día difieren mucho de los solterones de antaño, que tenían fama de tristones, aburridos y con pocas ansias de pasarlo bien. Los singles” marcan una nueva tendencia de vida basada en el no al compromiso y en regalarse todos los caprichos que desean. Cuidarse es su principal objetivo, aunque suene un poco egoísta.